Un botellazo al ojo derecho de Fernando Brandán provocó que Tigre y Chacarita no se terminara de jugar

Por los 32avos de la Copa Argentina AXION Energy, Tigre iba ganando por 1-0 ante Chacarita, con gol de Brahian Alemán en el Estadio Julio Humberto Grondona (Sarandí, Buenos Aires), pero el clásico fue suspendido al minuto siete del segundo tiempo porque un hincha del Matador de Victoria arrojó una botella al ojo derecho de Fernando Brandán. Es oportuno recordar que el árbitro prinicipal fue Ariel Penel y TyC Sports se hizo cargo de la transmisión, al igual que TyC Sports Play.  

Ni bien iniciadas las acciones, El Funebrero arrancó con todo. De hecho, avisó primero a través de Brandán, quien elaboró un remate suyo en el que rozó el poste. A continuación, Claudio Pombo sacó un zapatazo desde afuera del área y Matías Tagliamonte despejó la pelota al córner. Desde entonces, el duelo se jugaba en la mitad de cancha y El Matador de Victoria no inquietaba al arco protegido por Federico Losas.

Luego de ese traspaso por el mediocampo, Chaca llegó de nuevo con otro pelotazo del ex-Gimnasia y Esgrima de Jujuy, Brandán, que pasó apenas por lo ancho. Posterior a eso, Rodrigo Salinas hizo que el balón rozara el travesaño. En la vereda del frente, se despertó el elenco comandado por Néstor Gorosito y llegó mediante un centro de Juan Cruz Esquivel, en el que Losas despejó al saque de esquina. Hasta el descanso, Tigre equiparó un poco el partido frente al Funebrero quieto. Sin embargo, el empate parcial en cero se mantuvo inamovible. 

Rumbo al segundo período, El Matador de Victoria salió con otra actitud y se acercó a través del paraguayo Blas Armoa y de Gonzalo Flores, quienes no acertaron en los metros finales. Suerte dispar corrió Alemán, que apenas recibió un pase perfecto del propio Gonza Flores, sacó un zurdazo esquinado para abrir la cuenta en favor del campeón de la Primera Nacional 2021.  

Tras ello, se produjo la expulsión de Agustín Cardozo por doble amonestación y en el medio de la discusión por la tarjeta roja, sumado a una gresca entre ambos planteles, lanzaron dos proyectiles sobre la humanidad de Brandán. Unó pego en la espalda y el segundo fue una botella de gran porte, que le terminó impactando de lleno en el rostro del jugador nombrado y que le impidió continuar.  

Luego de varios minutos de deliberaciones entre futbolistas, técnicos, dirigentes y toda la terna arbitral, el cuerpo médico de Chacarita informó que Brandán no estaba en condiciones físicas de seguir y se decidió la suspensión del encuentro. 

Si la Asociación del Fútbol Argentino fuera una institución seria, debería darle por perdido a Tigre y darle la clasificación al Funebrero. Pero, se sabe como es el espiritu del Tribunal de Disciplina de la AFA: que se jueguen igual los minutos restantes y a puertas cerradas en un estadio neutral. Mientras tanto, San Lorenzo e Independiente de Chivilcoy, quienes se cruzarán la próxima semana, tendrán que esperar el resultado final de Tigre y Chacarita.