Gimnasia y Esgrima de La Plata logró mantener su estatus en la Liga Profesional de Fútbol tras haber ganado por 1-0 un desempate crucial contra Colón (Santa Fe), quien se convirtió en el segundo equipo en descender a la Primera Nacional. En un enfrentamiento que se desenvolvió como una auténtica final, Nicolás Colazo clavó un zapatazo formidable al ángulo superior derecho para que Gimnasia se llevara una victoria enorme de su visita al Estadio Coloso Marcelo Bielsa (Rosario, Santa Fe).
El encuentro fue intenso, equilibrado y con escasas oportunidades de gol. A pesar de un comienzo accidentado por la lesión de Germán Conti, el equipo dirigido por Israel Damonte mostró una cierta ventaja. Sin embargo, cerca del final de la primera mitad, el entrenador Leonardo Madelón y sus dirigidos lograron dar un golpe certero. Al minuto 42, una excelente combinación ofensiva culminó con Franco Soldano asistiendo a Colazo, quien desató un zurdazo impecable al ángulo para desatar la euforia en la hinchada Tripera.
En la segunda mitad, El Sabalero se adueñó progresivamente del terreno de juego y El Lobo no logró concretar las oportunidades de contraataque. Es oportuno resaltar que Matías Ibáñez se lució con una destacada intervención ante Matías Abaldo, mientras que Benjamín Domínguez e Ivo Mammini erraron dos mano a mano frente al nombrado golero del cuadro santafesino. Por otro lado, el arquero de GELP, Nelson Insfrán, fue héroe porque tuvo dos impresionantes atajadas ante Ramón Ábila y Baldomero Perlaza.
Al fin y al cabo, ganó Gimnasia y Esgrima La Plata por 1-0 contra Colón (Santa Fe) y seguirá un año más en la élite del fútbol argentino. Suerte dispar corrió El Sabalero, que descendió a la Primera Nacional tras nueve años. De hecho, bajó de categoría junto con Arsenal de Sarandí, quien tuvo el peor promedio del descenso con un coeficiente de 0,958.