Victoria del Inter con aroma argentino

Los argentinos Lautaro Martínez y Valentín Carboni aparecieron y dieron vuelta el encuentro disputado en Seattle para darle los tres puntos al Inter en el marco de la segunda jornada del Mundial de Clubes y meterlo en la pelea por la clasificación a la próxima fase del torneo; el primer gol del partido para Urawa Red Diamonds lo hizo Ryoma Watanabe.

El partido comenzó con un Inter dinámico y rápido a la hora de atacar, de modo que ya en el primer minuto de juego, Luis Enrique se perdió la primera debajo del arco, tras un pase de Carlos Augusto. Un par de minutos después de esa jugada, el equipo japonés atacó, por primera vez, y aprovechó esa ocasión. Un desborde de Takura Kaneko, rompió la defensa italiana, tiro el centro desde la derecha, recibió Watanabe, quien golpeó de primera y marcó su primer tanto en el Mundial de Clubes.

Inter se metía cada vez más en campo rival, provocaba que Urawa retroceda a pocos metros de su arquero, en la última línea, y así fue que Lautaro tuvo su primera oportunidad, con un cabezazo, proveniente de la pelota que mandó Kristjan Asllani desde la izquierda, y que pegó en el travesaño.

El primer tiempo llegaba a su fin, con sorpresa, por la victoria parcial del conjunto japonés y porque aún el equipo de Cristian Chivu no reaccionaba.

Los primeros minutos del segundo tiempo se parecieron al primero, ya que Inter pasaba la pelota sin saber para qué, sin ideas concretas y con llegadas que no terminaban en nada. La única opción que le quedaba al escuadra italiana es probar desde afuera, y es así que Asllani intentaba con remates desde afuera, que algunos se iban muy desviados y otros pasaban cerca de los tres palos.

Inter no podía romper la estructura defensiva de Urawa, probó con centros, tiros desde afuera, individualismo de sus jugadores y no conseguía incomodar a Shusaku Nishikawa. De hecho, ante los constantes ataques del subcampeón de la Champions, en algunas oportunidades se producian contrataques de los jugadores japoneses, como la subida por la banda derecha del delantero Yusuke Matsuo que al llegar al área jugó con el autor del gol y esta vez la mandaba afuera. Tambien antes de los 30 minutos Takahiro Sekire probó desde fuera y retuvo facilmente Yann Sommer.

A los 32 minutos, llegaba el tan ansiado gol del Inter y quién más que Lautaro. En un tiro de esquina, le ganó la pulseada al rival, se inventó una chilena, con su pierna hábil y la metió al primer palo del arquero japonés para poner el partido 1 a 1.

Luego del gol del "10", ingresó del banco de suplentes Valentín Carboni, quien volvía tras una lesión y al mismo tiempo debutaba con la Nerazzurri. Quién iba a decir que en ese contexto, con un Inter apagado y que no estaba en su mejor momento, se le daría una oportunidad. Y fue así, porque en el tiempo añadido, le quedaría la pelota, posterior a una serie de rebotes, y la cruzó por abajo al segundo palo para, de esa forma, adelantar a su equipo en el marcador y  darle la victoria.