Edinson Cavani y Jorge Almirón se juegan mucho con Boca ante Palmeiras

Es la noche, a todo o nada. Boca está ante una situación en donde las palabras se acaban y es hora de la verdad, o más bien lo será a partir de las 21:30 horas (hora argentina), cuando se defina un finalista entre el Palmeiras de Brasil o el cuadro de La Riber, pero además será el partido del año tanto para Edinson Cavani y más para su director técnico, Jorge Almirón. El Xeneize registra apenas dos triunfos en 13 partidos y viene de perder ante River el Superclásico con un esquema lleno de cuestionamientos. Haberlo ganado habría significado cortar una racha que pesa y llegar envalentonado para esta noche.

Lo más claro que tiene el equipo parecería ser justamente este último, porque de no mediar sorpresas es muy probable que repita el mismo 11 que en la ida y eso incluiría claramente la presencia del delantero Cavani. Un jugador que llegó para marcar la diferencia en esta competición y sobre todo partidos, pero no está cumpliendo las expectativas y sus números son muy pobres; ya que apenas hizo un gol en 10 presentaciones. No hay que engañarnos tampoco, el nombre de un jugador de su clase tampoco puede opacar los números que venía teniendo. El año pasado apenas siete festejos en 28 partidos y en su última temporada con Manchester United, hizo dos goles en 20 cotejos.

Por otro lado, está el entrenador, Almirón, que tiene el partido del año con Boca. Viene ni más ni menos que de perder el Superclásico en una ola de cuestionamientos por el equipo suplente que puso de movida y los hinchas consideraron que regaló el primer tiempo. La relación entre el entrenador y estos últimos tampoco es la mejor. No lo bancan a muerte y quedar afuera de la Copa Libertadores esta noche podría hasta marcar el fin a su ciclo en Boca.

Es que con su conducción técnica, el equipo nunca convenció en la cancha. Tal es así que llegó a esta instancia sin llevarse ninguna serie en los 90 minutos, siendo el primer equipo en lograrlo con el formato moderno implementado en 1989. La figura de Sergio Romero fue determinante atajando 10 de los 19 penales que le patearon y por esa vía el equipo se llevó las tres series de este año contra Nacional, Racing y Almagro. El DT ya sabe lo que es jugar una final de América porque lo hizo con Lanús en 2017, pero eso quedó atrás y esta noche se juega gran parte de su futuro.

Boca deberá hoy enfrentar la frustración de no poder lograr la máxima conquista desde 2007. En los últimos años estuvo cerca con cuatro semifinales en el camino (2008, 2016, 2019 y 2020) y dos finales (2012 y 2018). En esos cinco enfrentamientos, tres de ellos fueron derrotas ante equipos brasileños. Sus verdugos fueron Fluminense, Corinthians, Independiente del Valle, Santos y River.