El día que Vélez conquistó el mundo

Un día como hoy, pero en 1994, Vélez Sarsfield logró el título más importante de su historia: la Copa Intercontinental. El Fortín de la mano de Carlos Bianchi derrotó por 2-0 al Milán de Italia dirigido por Fabio Capello en el Estadio Nacional de Tokio (Japón). Los goles de aquella fecha inolvidable fueron de Roberto Trotta desde el punto penal y de Omar Asad. 

Este torneo consistía en un partido único entre el campeón de la Copa Libertadores contra el ganador de la UEFA Champions League. Por un lado, Vélez se consagró campeón de América al vencer a Sao Paulo de Brasil por 5-3 mediante ejecuciones desde los 12 pasos en el Estadio Morumbi (Sao Paulo, Brasil), tras haber ganado por 1-0 en Liniers y caer por el mismo resultado en Brasil. En la vereda del frente, Milán aplastó al Barcelona de Johan Cruyff por 4-0 y conquistó Europa.

En el Milán fueron titulares siete jugadores que formaron parte de la selección italiana que fue subcampeón del Mundial de ese año que se disputó en Estados Unidos, tales como Franco Baresi, Alessandro Costacurta, Paolo Maldini, Mauro Tassotti, Demetrio Albertini, Roberto Donadoni y Daniele Massaro.

El equipo italiano era el favorito en quedarse con la Intercontinental, que dominó la posesión del balón en el comienzo del partido, pero La V Azulada logró emparejar y se fueron al descanso sin goles. En la segunda mitad, en menos de 15 minutos ganaba el Fortín por 2-0.

A los cinco, saque de José Luis Félix Chilavert que le quedó a José Basualdo y él envió un centro al área en el que Costacurta agarró a José Flores y el árbitro José Joaquín Torres sancionó penal para Vélez. El Cabezón Trotta se encargó de la ejecución y lo cambió por gol, en el que la pelota pasó entre las piernas del arquero Sebastiano Rossi. A los 12, Costacurta se equivocó y el Turco Asad con una pirueta marcó el segundo tanto para desatar la locura fortinera.

Y así, Vélez tocó el cielo con las manos. Con 84 años de historia, estampó la estrella dorada en su logo y fue su cuarto título y segundo a nivel internacional. La consagración del equipo del Virrey Bianchi fue la séptima para Argentina, que volvió a tener un campeón del mundo después de ocho años.

Milan 0-2 Vélez: Goles