La lluvia trajo una goleada: Boca 5-0 Newell´s

Con una actuación colectiva de alto vuelo y rendimientos individuales en gran nivel, Boca dirigido por Claudio Úbeda aplastó a un flojo Newell’s y se adueñó de la punta de la Zona A, a falta de cuatro fechas para el cierre.

La Bombonera volvió a ser escenario de una fiesta azul y oro, Boca Juniors le pasó por encima a Newell’s y lo goleó 5 a 0, en un partido que desde el arranque mostró la diferencia abismal entre uno y otro, con este triunfo, el conjunto de Claudio Úbeda se subió a la cima de la Zona A del Torneo Clausura y desató la euforia de su gente, que celebró a pesar de la lluvia.

Boca golpeó rapido, a penas a los siete minutos, Milton Giménez conectó de cabeza un gran centro de Juan Barinaga para abrir la cuenta, el delantero volvió a aparecer poco después para ampliar diferencias tras una jugada que había comenzadocon un remate de Merentiel y a los 31, Ayrton Costa aprovechó un rebote dentro del área para marcar el tercero, así, al descanso, el Xeneize ya ganaba 3-0 con autoridad y con una superioridad que se veía en cada sector de la cancha.

Newell’s apenas insinuó una respuesta con algún avance aislado, pero nunca inquietó a Marchesín, la Lepra, que venía golpeada en lo anímico y en lo futbolístico, terminó cediendo terreno y se resignó demasiado pronto, el regreso de Darío Benedetto a la Bombonera, esta vez con la camiseta rojinegra, quedó apenas como una anécdota entre los silbidos de los hinchas locales.

La segunda parte no hizo más que ratificar la tendencia, a los 4 minutos, Brian Aguirre cumplió con la ley del ex y anotó el cuarto con un cabezazo en el área chica, pidiendo disculpas tras el festejo y a los 14, Lautaro Blanco coronó su buena actuación con un zurdazo que se coló entre las piernas de Espínola. 

Con el 5-0 consumado, Boca siguió manejando el partido a placer, Úbeda movió el banco y le dio minutos a Zeballos y Ander Herrera, mientras la gente cantaba bajo la lluvia, el dominio fue total y la única incógnita en el tramo final fue si llegaría el sexto, algo que evitó el arquero de la Lepra con reflejos notables ante intentos de Battaglia y Giménez.

El pitazo final de Sebastían Zunino decretó la fiesta completa: Boca es puntero y depende de sí mismo en la recta decisiva del campeonato. Con rendimientos altos como los de Giménez, Barinaga y el siempre influyente Paredes, el Xeneize dejó en claro que tiene con qué ilusionarse.

En la otra vereda, Newell’s sigue en caída libre. El equipo de Christian Fabbiani no logra levantar y quedó penúltimo en la tabla, con preocupaciones serias de cara a las últimas cuatro fechas.