Gimnasia y un triunfo clave en un partido insólito

Gimnasia y Esgrima La Plata se impuso como local por 1-0 en el cierre de la séptima fecha del Clausura ante Atlético Tucumán en un partido donde pasó de todo y que terminó de una forma insólita. El único tanto del partido lo hizo en contra el defensor visitante, Damián Martínez.

El primer tiempo fue protagonista Gimnasia que incluso tuvo la clara chance de abrir el marcador por medio de Torres. Encima Atlético, que intentaba poco y no era claro en su juego, se quedó con uno menos tras la expulsión de Díaz a los 27 minutos; con un partido para cualquiera de los dos, se fueron al descanso sin goles.

El complemento fue mucho mejor para ambos. Gimnasia tuvo la fortuna mayor por un gol en contra de la visita en los pies de Martínez, que a los nueve minutos intentó despejar un centro por derecha de Jeremías Merlo, pero la pelota terminó entrando en su propio arco. Sin embargo el Decano creció y el Lobo aguantó.

La locura se produjo a los 28 minutos cuando Pablo Dóvalo suspendió el partido por corte de luz en El Bosque. Ahí pasó de todo; primero la decisión de no jugarlo porque desde el dueño de casa le dijeron "no vuelve". Empezó a quejarse Alejandro Pusineri (DT visitante), que sospechó de que todo se trataba de una estrategia de la gente de Gimnasia. En diálogo con la TV, mientras el partido estaba suspendido, expresó: "Es vieja esta de la luz".

En la vereda de enfrente, Leandro Orfila se enojó con Dóvalo porque no le gustó que sólo hablara con el entrenador visitante. Ahí se armó un cónclave de tres y convencieron al árbitro de jugar lo que resta a insólitamente, porque no se veía nada. En la reanudación Gimnasia desperdició dos contras claras para aumentar el marcador y Atlético amenazó acariciando el empate dos veces. Fue final y triunfo vital de Gimnasia en La Plata en su lucha por permanecer en Primera.