Atlético Tucumán superó ampliamente a Talleres y lo mandó al fondo de la tabla

Atlético Tucuman aplastó a Talleres por tres tantos contra cero en el Estadio Monumental Presidente José Fierro en lo que respecta a la jornada seis del Torneo Clausura; Leandro Díaz, Adrián Sánchez y Marcelo Brizuela fueron quienes marcaron para el Decano y dejaron al borde del descenso por tabla anual al conjunto de Carlos Tévez que cuenta con tan solo 18 puntos.

El equipo de Lucas Pusineri se plantó muy bien en el ataque y de esta manera, en los primero cinco minutos, ya se originaba una jugada de peligro a través de Nicolás Laméndola, un exAldosivi, que obtuvo la pelota por la izquierda, remató con la zurda y Herrera atajó.

Diez minutos después, Leandro Díaz ponía el primero. Laméndola en una gran jugada individual, se liberó de su marca para luego mandar un centro al punto penal, donde se encontraba el Loco que cabeceó y convirtió para el Decano.

A los 15, Atlético estiró la ventaja, Brizuela recibió por el sector izquierdo, disparó con la zurda de afuera, se desvió e ingresó.

Minutos más tarde, Sánchez casi marca el tercero porque remató con la derecha dentro del área y pasó muy cerca del palo izquierdo.

A penas arrancó la segunda mitad, Laméndola desbordó, gambeteó por izquierda, lanzó el centro y Sánchez en su segunda chance de gol logró marcar.

Talleres golpeado intentaba responder de la mano de Rick que captó la pelota dentro del área, la punteó y Mansilla llegó a mandarla al córner.

Cerca de los 20 se produjo otra llegada de la T mediante un centro desde la derecha de Depietri que pedía un cabezazo, pero Navarro no pudo darle potencia.

En el minuto 27, Férnandez tiró de afuera con su pierna diestra, Mansilla se estiró lo más que pudo, la desvió y pegó en el travesaño.

El tiempo se iba y antes de que finalice el partido ambos equipos se quedaron con diez futbolistas, debido a que, por el lado del equipo visitante, al minuto 36, se fue expulsado Portilla por un codazo a Rodríguez. Por otra parte, el Decano se quedó con uno menos cerca del final cuando Acosta pisó fuertemente a Girotti.