Relataba con el Alma: a 31 años de la partida de José María Muñoz

Este sábado 14 de octubre, se cumplen 31 años del fallecimiento del relator de América, el profesional de la voz que hasta el último de sus días mantuvo encendida la llama del amor al relato, una llama que el tiempo apagó pero que sigue iluminando en las nuevas generaciones cuando se enseñan las técnicas del periodismo. No tenía feriados, ni cumpleaños, ni francos, ni nada. Era sencillamente imparable, tan así que el último partido que relató fue un Boca - River. Un detalle es que lo hizo desde la camilla de un hospital en un pésimo estado de salud con 68 años. Sencillamente es José María Muñoz.

Ese 12 de octubre de 1992 cualquiera que tuviese una radio se prestaba a sintonizar Radio Rivadavia para la transmisión de La Oral Deportiva y contaban los segundos para poder escuchar esa inconfundible voz que unía a todos los argentinos, más allá de las diferencias ideológicas que pudieran haber. Esa tarde algo no era igual, su voz se entre cortaba, había sensación de rareza y hasta por momentos, ese no parecía José María. El tiempo explicó por qué. Dos días más tarde, el 14 de octubre, falleció en esa misma cama.

Si, el mismo que alguna vez emocionó a todos con la famosa comunicación del mejor de todos los tiempos con su madre, Doña Tota, post consagración del Mundial de México 1986. En esa histórica consagración ya había marcado el camino el 22 de junio de 1986: "Va a restar Cucciufo. Está siempre atento sacando la pelota para Enrique, Enrique jugándola corta para Diego, a Diego lo marcan dos, sale entre dos...  Se lleva la pelota Maradona ¡Espectacular! ¡Se lleva el esférico entre tres! Se acerca al área, peligro, pasa el cuarto, peligro de gol, entre y sigue... ¡Gooooool!", sonaba esa tarde mientras toda una nación sufrida por una absurda guerra unida entre llanto con un puño apretado ante Inglaterra.

EL  MÁS COMPLETO DE TODOS LOS TIEMPOS

Muñoz te informaba de todo. Si se lo escuchaba podías enterarte absolutamente de todo el deporte. Desde un Torneo Panamericano de Handball hasta el final de la Primera B por el ascenso en nuestro fútbol argentino. José María tenía cronistas y corresponsales en cada rincón del mundo, en cada deporte e hizo de su apellido una verdadera marca distintiva y auténtica. Hoy los micrófonos extrañan su voz en las canchas, pero en el cielo suena cada vez mejor.